¡MI HIJO NO QUIERE CEPILLARSE LOS DIENTES! ¿QUÉ PODEMOS HACER?
Cuando los papás vienen preocupados y nos cuentan que la hora del cepillado es muy complicada, que los niños siempre buscan excusas, que hay gritos y peleas y que nunca hacen caso… y que cuando consiguen que se los cepillen lo hacen rápido y mal… siempre os preguntamos esto: ¿ellos os han visto a vosotros cepillaros los dientes? ¿es un hábito habitual en casa? hacéis horarios distintos y no os pueden observar mientras os cepilláis?
El cepillado dental tiene que realizarse desde que erupciona el primer diente en la boca, pudiendo ser desde los 4 meses hasta los 18 meses de edad. En cuanto sale el primer diente hay que empezar la rutina de cepillado dental 2 veces al día con ayuda de un adulto, y este adulto debería cepillárselos también a la vez que el niño para que el bebé observe. Los niños aprenden por imitación, y si en casa hay unos buenos hábitos de higiene, el niño los va a adquirir con mucha facilidad.
Si hacéis horarios distintos y cenáis a horas diferentes, igualmente cepíllate los dientes con él/ella. Crea un ambiente tranquilo y divertido, puedes cantar una canción para los dientes, y puedes hacer mucho refuerzo positivo diciéndole que lo está haciendo muy bien.
El cepillado dental de los bebés tiene que realizarlo un adulto, pero después podemos dejarle el cepillo al niñ@ para que juegue y explore.
A partir de los 6 años los niñ@s pueden empezar a cepillarse solos, pero posteriormente se recomienda un repaso por parte de un adulto. Y a partir de los 9 años ya pueden realizarlo de manera autónoma pero siempre con supervisión.
Si desde bien pequeños adquieren la costumbre de cepillarse después del desayuno y después de la cena, a medida que vayan creciendo tendrán el habito tan asumido que es difícil que se nieguen a realizarlo o que se convierta en un momento de discusiones en casa.
Puede ser que llegue un momento de rebeldía, cuando se acercan a la adolescencia. En este momento sí que puede ser que cueste más todos los hábitos que ya tenía adquiridos y nos quieran llevar la contraria en todo. En estos momentos se necesita mucha paciencia y confiar en que si tienen la base adquirida y los hábitos de higiene forman parte de ellos, lo harán y serán suficientemente responsables para entender que hay cosas innegociables, y la higiene es una de ellas.
Así que nuestra respuesta a la pregunta del inicio es que os cepilléis con ellos, que os imiten, que lo hagáis 2 veces al día desde que son bebés, que sea un momento divertido y que sea tan habitual y normal el cepillado de dientes que nunca se puedan plantear la opción de no realizarlo.